Antes de entrar en un proceso de selección debemos asegurarnos de que vamos a tener el tiempo necesario que se requiere para ello. Por suerte o por desgracia, en este mundo tan globalizado la mayoría de las empresas o universidades recurren antes de pasar a las entrevistas o dinámicas de grupo, al e-recruitment. Para ello, el departamento de Recursos Humanos desarrolla un sistema, un proceso de selección, nada fácil de abordar (pero no imposible).
Los procesos de selección suelen ser cada vez más tediosos, largos y se tiene la sensación de que también son interminables. Con este recurso, la empresa, la Universidad o la fundación que otorga la beca logran hacer la primera y más importante criba de posibles candidatos. Y es que no es fácil llegar hasta el final de un proceso de selección. Rellenando la última pregunta ya demuestras tu interés e idoneidad para la vacante.
A cada paso que se da, cada respuesta que se contesta o información personal que se aporta parece que ya va a ser la última, pero no, después quieren aún más. Las notas de la Universidad que nunca pediste (no el título, sino un certificado de notas) pues a ti, con ver que ibas aprobando en la intranet de la "Uni", te era suficiente, y ahora resultan imprescindibles para el trabajo de tus sueños, o la beca que necesitas para estudiar un máster en el extranjero.
Por no hablar del vocabulario. ¿De dónde sacan tantos conceptos diferentes? ¿Por qué no explicarán brevemente lo que es cada uno para que no haya lugar a dudas? A continuación, te dejo algunas palabras a las que me he enfrentado en distintos procesos de selección. Con esto, tesón y mucha paciencia, ¡seguro que te sale genial y logras pasar a la siguiente fase!
-Carta de motivación: en este texto debemos explicar por qué somos el mejor candidato para el puesto, beca o prácticas, y aportar características de nuestra personalidad. Tiene por tanto que estar especializada en la empresa o universidad y en nosotros. No debe ser repetitiva respecto a lo que se cuenta en nuestro cv y no debe excederse en más de una página.
-Carta de presentación: en la carta de presentación se deben resumir tus logros y habilidades, destacar lo más positivo e idóneo para el puesto. Es un resumen sobre nosotros, el primer vistazo que darán a nuestras aptitudes para el trabajo o beca.
-Carta de recomendación: si estás postulando para un puesto laboral una de ellas o la única, es recomendable que esté escrita por alguien que haya trabajado contigo. Mientras que si es de para un master o posgrado, debería de ser de un académico, alguien que te haya dado clases. En cualquier caso, no deben ocupar más de un folio.
-Historial: en ocasiones, además del cv y las cartas, también te piden un historial, un cv muy breve, de una página nada más.
-Biografía: otras veces te exigen una biografía. Debe escribirse en tercera persona (aunque resulte raro) y debe incluirse dónde se nació, dónde se vive, pero como norma general, no debe tener ni menos de 170 palabras ni más de 250.
-Know-how: en muchos procesos de selección, se te harán preguntas sobre cómo responderás ante ciertos retos, situaciones banales o ejercicios específicos. Tendrás que demostrar tu "saber-hacer". Algunas preguntas o casos son más para ver tu psicología y otras tu experiencia laboral.
-Análisis DAFO personal: como si te trataras de una empresa con miles de empleados y transacciones millonarias. A veces en los procesos de selección se demanda un DAFO personal, es decir, que detalles tus Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades (respecto a la empresa).
-Análisis DAFO: otras veces te piden que hagas un DAFO general de la empresa a la que estás postulando tu candidatura. Con esto comprueban que has estudiado y analizado a la empresa, demostrando tu interés y cualidades.
-Competencias: según la RAE uno de sus significados es el de: "Pericia, aptitud o idoneidad para hacer algo o intervenir en un asunto determinado". En ocasiones te piden que resumas en tres frases tus competencias, algo así como por qué tus comportamientos, capacidades, conocimientos y aptitudes te harán responder más eficazmente a las exigencias de tu futuro puesto laboral.
-Exigencias: no sólo lo que te vas a exigir a ti mismo, sino las competencias necesarias que posees para realizar las funciones del puesto de trabajo.
¡Y todo esto sin pasar a las entrevistas personales o las pruebas físicas como las dinámicas de grupo!