Verano 2018: Escápate de Roma, Sicilia te Espera
Texto por Sabrina Andrea Sachs – Traducción por María de los Ángeles Morales.
A pesar de lo bonita que es Roma, estoy segura de que este verano te encantaría escapar un poco de la Dolce Vita. Si aún no tienes planes, te recomiendo Sicilia. No solo porque el año pasado estuve varios meses explorando esta preciosa isla, sino también porque pienso volver el mes que viene.
¿Aún no estás convencido?
Sicilia ha sido durante mucho tiempo cruce de caminos y crisol de culturas del Mediterráneo. En la actualidad, la isla es un increíble palimpsesto del que emergen templos griegos, iglesias normandas y palacios barrocos.
Pero también cuenta con abundantes paraísos naturales, desde los cráteres humeantes del Monte Etna hasta las playas relativamente vírgenes de la costa sur.
¿Te ves ya allí?
Aquí tienes nuestras 9 razones para visitar Sicilia este verano.
1 La vida es una playa de Sicilia
Tanto si prefieres constuir castillos de arena como si te gusta tumbarte entre las rocas, Sicilia lo tiene todo. Con una costa infinita, la isla cuenta con unas playas amplias, además de bahías apartadas. Algunas de las mejores playas están protegidas como reservas naturales. A mí particularmente me encantan Vendicari y Lo Zingaro.
2 Comida. Espléndida comida.
¿En una palabra? A-L-U-C-I-N-A-N-T-E.
Por supuesto, como en el resto de Italia, los aromas y los sabores en general son fantásticos. Pero concretamente en Sicilia, todo se multiplica. Si te gusta el pescado, esta isla será tu destino favorito en el mundo entero.
Pero no te olvides de probar los arancini, cannoli, cassata y todo lo demás.
3 Umm, la deliciosa comida callejera
Es cierto, la comida callejera de Sicilia necesita una mención aparte. De hecho, probablemente sea la región de Italia que más puede recordarte a Asia. Hay vendedores callejeros de comida por cualquier parte, de día y de noche y con todo tipo de delicias. En Palermo, no te olvides de visitar los frecuentados mercados de Vucciria, Ballarò y Capo para probar los panelle y stighiolle. También te recomiento que localices a Rocky Basile, el ‘Rey de Vucciria’, para probar sus mundialmente famosos pani ca meusa.
4 Brioche con helado
Vale, es un cruasán con helado para desayunar, pero también merece una mención especial, no te parece. Lo digo en serio, no estoy bromeando.
5 Un paraíso de historia y arquitectura
Con una historia tan amplia y multicultural, Sicilia cuenta con una fascinante mezcla arquitectónica incomparable en el resto de Europa y quizás en el mundo. Uno de los lugares más impresionantes es el Valle de los Templos, cerca de la ciudad de Agrigento, que verdaderamente es una maravilla de la arquitectura. Por otro lado tenemos el Templo de la Concordia, conocido por ser el templo griego mejor conservado del mundo. ¿Y qué decir de los cientos de preciosas iglesias?
6 Excursiones en barco
Sicilia no es solo una única isla grande, sino que está rodeada por un archipiélago mágico. Puedes hacer excursiones de un día a Egadi o Eolie o hacer un crucero en yate de 2 o 3 noches en Lampedusa.
7 Subir a un volcán
El Señor Etna (no es una errata) es una montaña enorme e impresionante. Para ser exactos, alcanza los 3329m, es la montaña más alta de Italia al sur de los Alpes y el volcán activo más grande de Europa. El Monte Etna está casi constantemente en estado de erupción y no es raro ver algo así:
8 Pequeños pueblos preciosos
No sé si solo me pasa a mí, pero siempre que viajo me parece que estoy obsesionada con los pueblos pequeños, con encanto, casi peatonales. Sobre todo si parecen laberintos enrevesados, llenos de escaleras y diminutas tiendas llenas de magia. Me encantan concretamente Modica, Ortigia y Ragusa Ibla.
9 Los sicilianos
Supongo que alguna vez habrás escuchado mitos y leyendas sobre los italianos. Bueno, pues recopílalas todas y luego ve a Sicilia. Te quedarás fascinado por la cantidad de gente encantadora que tienes alrededor. De verdad, que pienso que nunca en mi vida había conocido a tantas personas maravillosas como el verano pasado.
Sabes ya por qué quiero volver, ¿no?