Los Mejores Lugares para Ver el Mundial en Sevilla
No importa si eres de Sevilla, si vives allí temporalmente o si simplemente estás de paso. De hecho, no importa ni siquiera si te gusta el fútbol o no; en el verano de 2018, como cada cuatro años, la ciudad (y el país entero) vivirá a ritmo de Mundial. Y, como todo el mundo sabe, el fútbol no se ve ni se vive igual si se ve solo o en compañía.
De hecho, pocas cosas hay más idiosincráticas del carácter del peninsular que eso de juntarse para ver el fútbol, normalmente en un bar. Poco importa que pague religiosamente su cuota de televisión para poder verlo en casa. Reunirse en casa de un amigo no está mal, pero nada como compartir pasiones y desvaríos con amigos, conocidos, desconocidos y camareros en algún bar atiborrado de gente, cañas espumeantes y servilletas por los suelos.
Así que si te gusta el fútbol o quieres vivir una de esas catarsis colectivas únicas sólo comparables a La Madrugá, te va a tocar ver algún partido. ¿Cuándo? Bueno, aquí tienes el calendario. ¿Dónde? ¡Pues para eso estamos aquí, alma de cántaro, para soplarte los mejores sitios para ver el Mundial 2018 en Sevilla!
Por una vez, no hay ruta de bares
- Encabeza la lista el Café Bar Mundial (pz. Encarnación 35). ¡Es que mira cómo se llama! Está junto a las Setas, la terraza es estupenda, es un sitio barato y sin pretensiones, perfecto.
- La Taberna La Auténtica (c/ Felipe II 6) hay que conocerla y frecuentarla haya fútbol o no; de hecho, en ocasiones como estas tendrás que ir un ratito antes si quieres pillar sitio y apalancarte como es debido.
- Una de las mejores opciones posibles es sin duda El Menta (c/Cueva de Menga s/n), lugar popular, económico, con cocina sencilla y resultona y un buen montón de pantallas.
- El Viriato (c/Viriato 7) es un sitio donde les gusta el fútbol y la buena comida, pero de verdad. Ideal para sibaritas (foodies no, que aquí son muy castizos) y seleccionadores frustrados (o sea, cualquier españolito medio).
A mí me gustan más las tascas de toda la vida, estrechas y con la tele de tubo en lo alto, de las que se encienden y apagan con un palo, pero debo reconocer que sitios como el Phoenix Pub (pz. Cuba 2) tienen su gracia para estas cosas: excelentemente situado, este irlandés genérico donde el plato típico es la montaña de nachos (¿?) tiene las enormes pantallas propias de un sports bar en condiciones.
También se nos ha ocurrido una alternativa más fresquita: ¿por qué no ver el fútbol en una de las piscinas públicas de Sevilla? No va a ser fácil, porque no hay muchas, aparte de los clubes privados (de precio prohibitivo) y no podemos garantizar que vayan a retransmitir el partido. Ni que les guste que te pongas a celebrar los goles haciendo la bomba. Pero fresquito vas a estar, eso seguro. Por si te animas, esta lista te será de ayuda.
¿Por qué no en pantalla gigante?
Otra opción muy interesante para los más jaraneros y los que prefieran el bullicio al deporte rey en sí mismo es acudir a alguno de los emplazamientos donde se instalarán pantallas gigantes para seguir los partidos como si se tratase de un acontecimiento nacional (si se pasa de cuartos de final, lo será).
Es bastante fácil encontrar estos emplazamientos, porque suelen ser sitios céntricos con mucho espacio donde se acumulan toneladas de carne humana untados en rojo y amarillo; a la mayoría ni les gusta el fútbol, pero ante la ocasión de pintarse la cara y bebe en la vía pública, ¿quién se resiste? Total, que malo será que no te topes con alguna de estas expresiones de la cultura de masas en su sentido más literal.
Aunque no he encontrado información fiable, es de suponer que se instalarán pantallas gigantes por lo menos en la Plaza de España (marco incomparable) y en la Plaza de la Encarnación (el Metropol Parasol; las Setas, vaya). Hablando de parasol, los partidos de la primera fase son a las 8 de la tarde; buena hora, pero no te confíes, recuerda que en Sevilla en verano hace algo de calorcillo.
Si no te convence ninguna de estas opciones aún te quedan otras dos: el bar de tu barrio o quedarte en casa con una cervecita, unas aceitunas y el ventilador, y tan ricamente. Claro, que no podrás unir tus berridos contra el árbitro con los del desconocido de al lado, ni recrear las jugadas controvertidas entre los dos. De momento, tenemos una cita el 15, el 20 y el 25 de junio. Y luego, ya veremos.