El Feng Shui está de moda: tips para novatos

Del Feng Shui se ha hablado mucho y muchos años, sobre todo si consideramos que lo que tenemos entre manos es una filosofía china milenaria. Marie Kondo, que es japonesa y no china, ha puesto el Feng Shui de moda, y no es para menos. Como con todo lo que se hace de repente un poco pop, nosotros no queremos quedarnos atrás. Por eso, hoy en Spotahome nos subimos al carro del orden y la armonía para darte unos trucos por los que tu estabilidad vital nos dará las gracias. Sigue leyendo.

1. Limpia, limpia y limpia más todavía (y no te olvides de ventilar)

Abres la ventana en un día amable de primavera y una brisa fresca te recarga las pilas para toda la jornada. Acabas de terminar de limpiar el baño y en los azulejos puedes ver hasta el color de tus ojos. Da gusto, ¿verdad? Pues viento y agua, porque Feng Shui significa literalmente eso: viento y agua. Deja que corra el aire por tu casa y no tengas compasión con las manchas. El alma interior de tu vivienda te lo agradecerá.

2. Luz y otro poquito más de luz

Si, en buena medida, el Feng Shui gira en torno a atraer energías positivas y expulsar las negativas, ¿cómo no vamos a hablar de la luz? Por esas ventanas por las que ahora corre el aire debe fluir también una buena cantidad de luz, así que vamos a aprovecharla. De hecho, es importante que ya al entrar a tu casa cualquiera sea bienvenido con un buen hachazo de luz, así que procura que tu recibidor no sea ningún espacio sombrío sacado de una peli barata de miedo. Por ejemplo, mira este apartamento en Madrid. Es sólo entrar y ya sentir la luz y el viento.

3. Feeling green: plantas donde sea

Viento, agua y, por supuesto, plantas. No te decimos que tu casa parezca de repente la selva, pero una plantita por aquí y unas flores por allá y tu vivienda rejuvenece de golpe unos cuantos años. Y no sólo tu vivienda: tú también lo harás. Las plantas depuran el ambiente y, durante el día, llenan de oxígeno las estancias de tu hogar. Además, como has de mimarlas y cuidarlas como si fueran una mascota, verlas crecer y llenarse de primavera es un buen trago para el alma. Puedes ponerles incluso nombre. Para el Feng Shui, las plantas son grandes focos de energía y unos estupendos revitalizadores. ¿O es que este salón que tenemos aquí no se ve mucho mejor con una planta?

4. Ten cuidado con los colores y olores

Para colores, gustos. ¿O no se decía algo así? Seguramente fuera al revés, pero lo importante es que te sientas a gusto con los colores de tu casa. Ahora bien, independientemente de ello, los colores suaves –blancos, grises, azules, colores pastel–son un acierto seguro para quien quiera llegar a un sitio y decir: paz, ven a mí. Un salón chillón posiblemente sea todo lo contrario al descanso. Aunque todo suene muy zen, si además le añades olores suaves y agradables --que para el Feng Shui son muy importantes--, cada vez le vas quitando más piedrecitas a tu camino hacia la armonía. Mira en este salón qué bien lo hacen (lo de los colores; a lo de los olores virtuales todavía no hemos llegado).

5. Armonizar y reorientar

En el Feng Shui es importante hasta la orientación de la cama. Suele decirse que esta debe mirar hacia el sur para que las energías positivas se concentren en tu habitación y no se escapen mientras duermes. Desde luego, es una versión más práctica y terrenal que el atrapasueños del cabecero de la cama. Además, recuerda que frente a este no debería haber ningún espejo, que también podría funcionar como pozo de malas vibras. Como ya ves, el Feng Shui no es particularmente caro y, aunque no te podemos prometer resultados ni a corto ni a largo plazo, ya sabes que no hay cambio que por bien no venga. ¿O esto tampoco era así? Bueno, lo que sí te podemos prometer es que este estudio en Berlín te va a encantar. Y esto sí que huele a Feng Shui.