Ya sea por motivos espirituales, en busca de aventura o como reto personal… el Camino de Santiago es definitivamente una experiencia de autodescubrimiento y de paso, ¡la oportunidad de conocer el norte de España!.
Esta ruta, también conocida como la calle Mayor de Europa (por la cantidad de peregrinos) data del siglo IX, y fue por primera vez recorrida por Alfonso II el Casto, rey de Asturias. A él le siguieron numerosos peregrinos, gracias a ello se construyeron varios monasterios y posadas en el camino hacia Santiago de Compostela; y poco a poco se abrieron otras vías desde otros países como Francia. Las cifras de peregrinos han ido creciendo, se dice que en 2017 fueron aproximadamente 300 mil los visitantes que emprendieron esta aventura.
En Spotahome te compartimos algunos datos curiosos para te animes a descubrir el encanto de este recorrido:
Los Caminos de Santiago, con itinerarios en España y en Francia (Itinerario Cultural Europeo) constan de nada más y nada menos que de 9 rutas: camino portugués (119km), camino francés Roncesvalles (Navarra), camino francés Somport (Aragón), camino primitivo (268km), camino del norte (815km), camino ingles (155km), vía de la plata (705km), Itinerario Jacobeo del Mar de Arousa y Río Ulla, camino a finisterre.
El camino francés (775km) considerado Patrimonio de la Humanidad Unesco. Es la ruta más famosa (también encontrarás más gente), comienza en los Pirineos con dos opciones de inicio, Navarra o Aragón. Ambas rutas se unen en la localidad de Puente la Reina, en dirección a Galicia.
Puedes recorrer el camino: caminando, en bicicleta o en caballo. Aunque la mayoría de los peregrinos lo hacen caminando, debes saber que requieres mínimo un mes si quieres recorrerlo de inicio a fin. ¡No te preocupes!, hay servicios para que viajes ligero, como el Paq Mochila que ofrece Correos.
Cada ruta, tiene diferentes etapas de descanso que debes organizar antes del viaje, dependiendo de: tu punto de partida, la modalidad del Camino (caminando, en bicicleta o en caballo) y de los kilómetros que quieras recorrer. Se sugieren recorridos máximos de 20- 25 kilómetros diarios a pie, y hasta 70 kilómetros en bicicleta.
Algo que te puede salvar, es conocer el saludo entre peregrinos: “ultreia et suseia”. Se cree que es en idioma celta y significa: más allá y más arriba, ahora y para siempre, etre otros. Y no te preocupes, si cruzas con personas en dirección contraria, al tratarse de senderos de gran recorrido también los recorren senderistas.
A menudo se trata de senderos naturales o de pequeñas sendas de gravilla, recuerda hacer pausas de unos diez minutos cada hora.
Además de portar la concha del peregrino (el símbolo del camino), ten siempre a la mano: DNI, tarjeta de la seguridad social, credencial del peregrino, impermeable, cantimplora, crema solar, cuerda y pinzas para tender, bañador y botiquín.
Las indicaciones de dirección a seguir son generalmente flechas pintadas de amarillo, placas institucionales, postes y otras señales. Incluso te puedes apoyar en los mapas incluidos en todas las guías prácticas. También encontraras mojones de granito que te indicarán que ya estas en Galicia y cada 500 metros te indicarán la distancia que queda hasta Compostela.
El momento ideal del año son primavera y otoño, por su clima favorecedor, y sobretodo para la disponibilidad en los albergues.
El recorrido se acredita con sellos otorgados por los albergues. Para ello, ocuparás la credencial de peregrino, que tiene un costo de 8 euros y es emitida por Oficina de Acogida al Peregrino. Este cuadernillo, te permite acceder y reservar los albergues (gîtes d’etape).
Al final, para los que recorran el Camino con motivo religioso, además de conocer la Catedral de Santiago de Compostela, pueden obtener el certificado Compostela.