Todo empieza por una buena planificación.
Lo primero, los menús: para ayudar durante este difícil periodo, os proponemos menús saludables con los que poder ayudaros a manteneros en forma y cuidando la salud. Por ejemplo, el equipo Futurlife21 ha preparado unas recetas fáciles y sanas para cocinar durante estos días. También tenemos a nuestro alcance apps que nos ayudan a planificar las recetas y aprovechar para probar cosas nuevas y salirnos un poco de lo mismo de siempre. Os recomendamos descargar Nooddle para seguir sus recetas paso a paso.
Ahora, a la compra: hay que evitar comprar alimentos procesados, snacks y bollería industrial, que en estos momentos resulta más tentador que nunca. Tomar grandes cantidades de azúcar no solo va a ayudarnos a coger unos kilos de más, sino que los estudios revelan que tienen un efecto muy negativo en la ansiedad. Sigue estos consejos a la hora de hacer la compra:
- Baja a comprar lo menos posible: te recomendamos que te hagas con un carro como el de nuestras abuelas, ya que debemos ir al supermercado sin compañía y no podremos repartir la carga. Con uno de ellos podrás cargar con la compra semanal tú mismo. Recuerda poner la leche y los productos de limpieza debajo y los artículos delicados encima. Haz la compra con responsabilidad, no acapares y no compres más cantidad de lo necesario, en estos tiempos hay que pensar en los demás más que nunca.
- Si compartes piso, aprovecha para hacer turnos de cocina: cuando te toque a ti hacer la comida, recuerda evitar alimentos ricos en grasas saturadas, frutas en almíbar y aumentar la ingesta de frutas y verduras. Te proponemos preparar un hummus casero de aperitivo con crudités y huir de las grasientas patatas fritas.
- Batidos sí, zumos no: Si tienes a mano una batidora, puedes preparar smoothies de frutas y verduras, que ayudarán a calmar su apetito en las mañanas. Olvídate de los zumos de brick (incluso de los recién exprimidos) pues sólo bebemos el azúcar y dejamos fuera la fibra, que es fundamental. La fruta, mejor siempre entera.
Una vez en la cocina, te recomendamos recetas de horno, son más fáciles de hacer y ensuciamos menos cacharros. Durante estos días de confinamiento, dejemos a un lado los fritos y las salsas, como la nata y la bechamel, porque añaden calorías de más a nuestra dieta y al no poder hacer ejercicio (por ejemplo si compartimos salón) es mejor dejarlos para más adelante. Así mismo, evitemos las masas de pan y harinas refinadas en la medida de lo posible.