Para viajar se nos ocurren mil motivos y excusas. Y por mucho que nos guste coger un avión, el encanto del tren es incomparable. Hacerlo en Europa, además, a través de sus excelentes infraestructuras ferroviarias es lo que te proponemos hoy. Y no puede ser de otra forma que a través del Interrail: mochila a la espalda y a conocer el mundo.
El Interrail es un billete que permite a residentes europeos conocer gran parte del continente a través de su red de trenes –los no residentes disponen del Eurail–. Aunque el periodo tradicional era el de un mes, las opciones varían desde los cuatro días hasta los tres meses y el recorrido puede ser en sólo un país o en varios. Desde su inauguración, más de 10 millones de residentes han viajado con Interrail a lo largo de redes de más de 250.000 kilómetros en 33 países diferentes.
Creado en 1972 con motivo del 50º aniversario de la Unión Internacional de Ferrocarriles, el Interrail se impulsó precisamente para promover el viaje a lo largo del continente entre los jóvenes europeos de hasta 21 años. Sin embargo, desde 1998 europeos de cualquier edad pueden acceder a la compra del pase del Interrail. Sin embargo, los precios variarán por segmentos de edad, distinguiéndose así cuatro grupos: niños (4-11), jóvenes (12-27), adultos (28-59) y adultos mayores (60 o más).
Si te interesa, hoy te dejamos aquí algunas de las rutas más populares que puedes hacer en el Interrail.
1. Empezando en Alemania…
Berlín es el punto de partida de muchos jóvenes que deciden escoger esta ruta especialmente en verano para conocer parte de Europa del Este y sus ciudades imperiales. Es habitual hacerla a lo largo de dos semanas con el Global Pass y el recorrido, a través de cinco países distintos, es el siguiente: Berlín, Praga, Cracovia, Budapest, Viena y Múnich.
2. Para conocer los países nórdicos…
Dos semanas dan también para hacer un recorrido muy completo por los países nórdicos. De hecho, esta ruta es muy popular entre quienes quieren matar varios pájaros de un tiro. A partir de Copenhague, los 15 días se pueden distribuir para conocer también Oslo, los fiordos de Bergen, Estocolmo, Tallín, Helsinki y finalmente Rovaniemi, en Finlandia. El pase puede incluir, además, los viajes en ferry para los desplazamientos hasta y desde Tallín, en Estonia.
3. Por los países bálticos…
Los países bálticos son grandes desconocidos para muchos turistas, pero cuentan con algunas de las capitales más bonitas del continente. Tallín, Riga y Vilna, a las que algunos conocen como las trillizas bálticas, son tres ciudades a las que se suele viajar en pack. Con 10 días da tiempo más que de sobra, pero también se pueden añadir al recorrido ciudades como Kaunas (Lituania), Daugavplis (Letonia) o Tartu (Estonia). En este enlace del propio Interrail dispones de más información.
4. Conociendo Italia…
Es uno de los clasicazos del Interrail y por méritos propios. Además, tiene fama de ser uno de los destinos más románticos disponibles del Interrail. Su trayecto a través de ciudades como Venecia o Verona posiblemente tenga algo que ver. En esta ruta diseñada por el propio Interrail el trayecto comienza en Roma y se dirige dirección norte hacia Florencia, Venecia, Verona y Milán, para acabar en los preciosos pueblos de Cinque Terre. En este enlace que te facilita la web de Interrail tienes un planificador con el recorrido completo.
5. Para sumergirse en el Mediterráneo…
Es otro de los viajes estrella para el verano. Quienes no conozcan bien el Mediterráneo tienen una oportunidad ideal para hacerlo en el Interrail. El itinerario que marca la propia web parte de Valencia para terminar en Roma, aunque este es modulable y queda a discreción de los viajantes. Barcelona, Marsella, Cannes, Génova y Livorno son algunas de las muchas ciudades que se pueden visitar de por medio en este trayecto que perfectamente se puede recorrer en 10 días.